Andrea.
Dos hermanos asesinos en serie, acusados de matar a once prostitutas, han
sido condenados a muerte en septiembre en la provincia china de Gansu. Shen
Changyin, de 30 años, y su hermano Shen Changping, de 22, empezaron
sus actividades criminales en junio del 2003 después de que su negocio
de repuestos automovilísticos fracasara. Su primera víctima
fue Yao Fang, a quien asesinaron tras asegurarse de que la clave de su cuenta
bancaria era la correcta. Después despedazaron el cuerpo para no
dejar rastro. Utilizaron el mismo método con Li Chunling, aunque
la mujer, en su desesperación por sobrevivir, les ofreció
colaborar en su "empresa" y llevarles más prostitutas.
Los hermanos aceptaron el trato, pero cuando Li les llevó a una colega
la obligaron a matarla ella misma para después sacarle los riñones
y quemar su cuerpo con ácido sulfúrico.
Después de repetir este modus operandi con tres mujeres más,
los hermanos decidieron cambiar de escenario y continuar en Taiyuan. Allí
convencieron a otra prostituta para que colaborara con ellos y la obligaron
a apuñalar a la víctima para después meter su cuerpo
en una procesadora de carne y tirar los desechos por el desagüe.
Tras continuar sus crímenes en ciudades cercanas, los hermanos
fueron capturados en Agosto de 2004.
Li también ha sido condenada a muerte por asesinato, y otras tres
mujeres han sido sentenciadas a penas de entre 3 y 20 años de cárcel
por cómplices.